El interior de las cuevas ha sido la morada más utilizada por los hombres durante milenios. La seguridad y el aislamiento que las poblaciones prehistóricas encontraron en estos primitivos abrigos naturales sería más tarde buscada por culturas como la musulmana, artífice de gran parte de las cuevas y casas cueva excavadas en la provincia granadina. Esta arquitectura subterránea, fiel reflejo de los cambios históricos, sociales y económicos de su entorno, se mimetiza con el paisaje y relieve, confiriendo a las zonas donde se concentra, las comarcas de Guadix y El Marquesado y Baza-Huéscar: El Altiplano, una expresiva belleza plástica. Un valioso patrimonio que se ha convertido en seña de identidad e importante recurso turístico.