Este escondido mirador se encuentra en la recoleta Placeta de los Carvajales, en la parte baja del Albaicín y muy cerca de las calles Calderería y sus teterías. Ofrece unas magníficas vistas de la Alhambra y el Generalife en contrapicado.
Especialmente al atardecer, el mirador destaca por su jolgorio y no es extraño ver a grupos de amigos que se citan en la plazuela con sus guitarras e instrumentos para tocar y cantar flamenco.