Conserva en su interior diferentes piezas de gran interés artístico, entre las que destaca una escultura anónima de la Virgen de los Dolores de finales del siglo XVI. También se encuentran dos tallas de Pedro de Mena de finales del siglo XVII, una Virgen con Niño y la Virgen de Belén, así como una Inmaculada de la escuela granadina de Alonso Cano.