Obra de la primera mitad del siglo XVI, de tres naves separadas por arcos de medio punto sobre pilares con medias columnas dóricas y entablamento. El templo fue proyectado por Francisco Antero y ejecutado por Ambrosio Villegas. La nave central está cubierta con artesonado mudéjar con decoración geométrica y policromada. Lo más interesante es su portada, situada en un lateral, con arco de medio punto encuadrado por columnas adosadas.