De estilo mudéjar data del primer tercio del siglo XVI. Está formada por una nave rectangular con arcos. El que se abre al presbiterio, de medio punto, es resultado de la reconstrucción de la iglesia tras el terremoto de Alhama (1884).
La cubierta cierra a dos aguas, sin decoración en el interior. El retablo neogótico, de factura moderna, está situado en el altar mayor. Destacan las obras artísticas de ’Las imágenes de la Dolorosa‘ de la escuela granadina del siglo XVIII, la de la Inmaculada y la de San Antonio de Padua.