El Concurso de Cante Jondo fue un hito para la historia de la cultura andaluza. Por primera vez, un gran número de intelectuales de diferentes disciplinas (escritores, pintores y músicos españoles e internacionales…), se involucraron tanto en la organización como en el desarrollo de un evento popular, que supuso el reconocimiento artístico e intelectual del “cante primitivo andaluz” que en aquellos años sobrevivía a duras penas en la memoria y la voz de algunos cantaores y corría el peligro de asimilarse a otras manifestaciones adulteradas como el cuplé.